¡Kumon España ya tiene 1.000 concluyentes!
Tener mil concluyentes nos llena de orgullo porque significa que hemos brindado a mil alumnos las herramientas necesarias no solo para desarrollar al máximo su potencial de aprendizaje y ser los verdaderos protagonistas de su educación, sino también para convertirse en personas más inteligentes, competentes y responsables. A través de nuestros programas educativos, en nuestros más de 230 centros en toda España formamos personas autodidactas y con la suficiente seguridad en sí mismas para superar sus retos de aprendizaje y tomar las riendas de su futuro.
Ser concluyente de Kumon significa no solo haber completado con éxito cualquiera de nuestros programas de aprendizaje (Kumon Matemáticas, Kumon Lectura o Kumon English), sino, además, haber desarrollado también una serie de habilidades y capacidades útiles para toda la vida, tales como la capacidad de aprender de forma autónoma; la confianza en uno mismo para enfrentarse a nuevos retos con seguridad y optimismo; la concentración; el hábito de estudio, y una actitud positiva ante el aprendizaje.
Para conseguirlo, trazamos un plan de aprendizaje a la medida de las necesidades reales y las capacidades de cada uno de nuestros alumnos. De esta manera, todos aprenden a aprender por sí mismos hasta que son capaces de estudiar, con autonomía y sin explicaciones, contenidos por encima de su nivel escolar.
Ella es Lucía Ruiz, ¡nuestra concluyente número 1.000!
Para Lucía, Kumon es sinónimo de aprendizaje autodidacta. Lucía empezó Kumon Matemáticas con 6 años y ha conseguido superar con éxito los 21 niveles del programa aprendiendo a enfrentarse a los ejercicios con autonomía y a hallar las soluciones por sí misma con ayuda de las pistas del material didáctico. Lucía ha cubierto todo el abanico de contenidos del programa, desde aprender a contar hasta resolver ejercicios de cálculo diferencial e integral, y lo que más le gusta son las ecuaciones.
El mayor beneficio que Lucía ha obtenido con Kumon Matemáticas es un incremento notable de su agilidad mental. «Antes me costaban mucho las matemáticas y era muy lenta resolviendo operaciones, pero ahora las resuelvo rápido y sin problemas», nos dice.
Lucía nos cuenta con orgullo que gracias a Kumon es una de las mejores en su clase de matemáticas del colegio y que para ella, concluir Kumon Matemáticas es un logro muy importante. Por eso ha recibido con muchísima ilusión y satisfacción su diploma de concluyente.
Para Lucía ha sido vital la motivación que le ha transmitido su orientadora. «He tenido la gran suerte de tener una orientadora cercana y paciente; quieras o no, te contagia las ganas de mejorar», comenta con una sonrisa.
Lucía es una chica de retos y por eso quiere continuar aprendiendo con Kumon. Su siguiente objetivo es ser alumna de Kumon Lectura y Kumon English. También se ha propuesto aprender coreano.
«Lucía es una alumna luchadora y con ganas de aprender y un afán de superación tremendo»
Ana Ferrando Pardo, directora y orientadora del centro Kumon Paterna - Centro, recuerda con orgullo y nostalgia el día que Lucía decidió concluir Kumon Matemáticas: «El día que su hermana recibió el diploma de concluyente, le pregunté si ella también lo lograría. Con una gran sonrisa y un brillo especial en los ojos, me respondió que ella también sería concluyente en breve».
Ana destaca que Lucía ha sido muy responsable en todos los aspectos relacionados con su aprendizaje y la describe como «una alumna luchadora y con ganas de aprender y un afán de superación tremendo».
Las estrategias de Lucía para aprender por sí misma
Con la debida orientación, Lucía fue descubriendo el valor del material didáctico y aprendiendo a aprender por sí misma. Su orientadora nos dice: «Para mí ha sido muy importante ayudarla a darse cuenta de que el profesor estaba delante de sus ojos, pero que no era yo. Era en las hojas de estudio donde siempre iba a encontrar las respuestas a sus preguntas».
Lucía aprendió a corregir sus errores siguiendo las pistas del material didáctico sin borrar toda la respuesta, sino observando cada uno de los pasos dados y encontrando sus fallos para corregirlos. A partir de entonces, se dio cuenta de que hay distintas formas de resolver un ejercicio y aprendió a escoger la más adecuada.
Ana ha disfrutado observando la evolución de Lucía tanto como lo hace día a día al ver a sus alumnos enfrentarse a nuevos retos. «Ver a un niño descubriendo qué le depara el cuadernillo del día y pensando en cómo resolverlo, ver cómo asume ese reto y una gran sonrisa de satisfacción en su rostro al conseguirlo, me llena de orgullo y me mola mucho», nos confiesa.
El papel de la familia en el aprendizaje de Lucía
En Kumon apostamos por la implicación de la familia para garantizar que el alumno desarrolle al máximo su potencial de aprendizaje.
La familia de Lucía ha estado muy implicada en la evolución de su aprendizaje. «La comunicación con su madre ha sido muy buena a lo largo de estos años. Juntas hemos fijado metas y estrategias de aprendizaje para que Lucía pudiera lograr sus propios objetivos. Su madre fue la responsable de calificar sus tareas hasta que Lucía pudo hacerlo sola, de animarla y de apoyarla en toda su trayectoria en Kumon», concluye su orientadora.
Si quieres que, como Lucía, tu hijo desarrolle al máximo todo su potencial de aprendizaje, contacta con tu centro Kumon más cercano.
Queremos dar las gracias a todos nuestros alumnos y a sus familias por confiar en el método Kumon, y a todos nuestros orientadores por su compromiso con una educación de calidad.
¡Esperamos seguir celebrando juntos el trabajo de nuestros alumnos!