M. Carmen Álvarez y Lola Yáñez: 25 años dedicados a la enseñanza con Kumon
Dedicamos nuestra Kumonteca de hoy a nuestras primeras orientadoras de Kumon, M. Carmen Álvarez y Lola Yáñez, quienes cumplen sus bodas de plata con Kumon, una vida dedicada a descubrir el potencial de los niños y a desarrollar al máximo sus capacidades de aprendizaje a través de nuestros programas de Kumon Matemáticas, Kumon Lectura y Kumon English.
M. Carmen Álvarez, orientadora del centro Kumon Alcorcón - Puerta del Sur
«En septiembre de 1992 me uní a Kumon. Los primeros años fueron de mucho trabajo; empecé en Alcorcón y dando clases particulares de Matemáticas con el método Kumon en Móstoles, en el colegio de San Antonio, en el colegio Montessori y en el colegio Nazaret, donde continúo dando clases.
»Kumon me ha regalado grandes momentos de satisfacción y de emoción, como cuando un niño se despide de mí llorando por el vínculo afectivo que se ha generado, o cuando, pasados los años, mis exalumnos traen a sus hijos al centro. Si tuviera que elegir un momento como profesora de Kumon, me quedo con la satisfacción de ver la cara de alegría de mis alumnos cuando mejoran sus notas.
»Para mí el método Kumon es especial porque me permite estar continuamente aprendiendo de los niños. Mi papel como profesora del centro es guiar a mis alumnos de la mejor manera, motivándolos y enseñándoles a ser capaces de aprender por sí mismos.
»Veo mis próximos años en Kumon con esperanza, ayudando a la mayor cantidad de niños posible».
Lola Yáñez, orientadora del centro Kumon Madrid - Arturo Soria
«En noviembre de 1992 abrí mi centro Kumon, en principio llamado Kumon el Bosque, por su ubicación cercana a esa zona de Arturo Soria. Hace tanto tiempo ya y a la vez parece tan poco...
Los alumnos me enseñan diariamente. Quizá lo que más me ha conmovido ha sido aprender que todo alumno puede conseguir aquello que se proponga, teniendo constancia y ganas de aprender».
Lola conoció el método Kumon en un momento en el que comenzaba una nueva etapa profesional en su vida, volviendo a retomar la enseñanza de matemáticas que tanto le había apasionado en el pasado.
Al igual que Toru Kumon, su primer alumno fue su hijo, con quien comprobó todos los beneficios del método. No solo lo ayudó a mejorar académicamente, sino que también le enseñó a organizarse, le proporcionó un alto grado de concentración y le transmitió el valor de la constancia y la perseverancia, de aprender a marcarse objetivos y de trabajar para conseguirlos. También le aportó la seguridad y la paciencia para perseguirlos, elevó su nivel de tolerancia ante la frustración y le enseñó el valor de los errores siempre que sean útiles en el aprendizaje.
Él es uno de los casi 25 alumnos que han terminado de manera exitosa el programa de Matemáticas en su centro. Lola confió en el método Kumon desde el principio: «El método Kumon es muy especial porque es individualizado (cada uno va a su ritmo) y autodidacta (enseña a aprender por uno mismo).
El programa de Matemáticas es espléndido (va directo a lo importante para dominar a la perfección las matemáticas de segundo de Bachillerato), al igual que el programa de Lectura, que desarrolla capacidades para ser un lector competente», afirma.
Lola Yáñez afronta el futuro del centro con muchas ganas e ilusión: «Abordo los próximos años con muchas expectativas de seguir mejorando».
El centro Kumon Alcorcón - Puerta del Sur
El centro Kumon Alcorcón - Puerta del Sur cuenta con 76 alumnos, 15 de los cuales trabajan contenidos por encima de su curso escolar de forma autodidacta.
¿Cómo lo consiguen? M. Carmen destaca la importancia de infundir al niño la confianza de tomar las riendas de su aprendizaje, lo que aumenta su motivación para tener éxito: «Nuestro objetivo es que todos y cada uno de los niños sean capaces de aprender por sí mismos y que puedan abordar conceptos académicos por encima de los que trabajan en su nivel escolar, con una actitud positiva ante el estudio».
El centro Kumon Madrid - Arturo Soria
El centro Kumon Madrid - Arturo Soria cuenta con 235 alumnos. Muchos de ellos ya trabajan contenidos por encima de su curso escolar de forma autodidacta y 23 han logrado en estos años ser concluyentes, es decir, finalizar los materiales de los programas Kumon.
¿Cómo lo consiguen? Lola destaca el esfuerzo de sus alumnos, la capacidad de superación y la perseverancia. «No hay mejor recompensa que un aprendizaje autónomo, en el que todo recae en ti», sostiene.