Durante las vacaciones, nuestros peques llevan a casa deberes escolares para mantener la mente en forma. Lo mismo ocurre con el curso en Kumon: nuestros alumnos deben continuar haciendo los cuadernillos en vacaciones para no perder agilidad mental.

«Si tienes un sueño, no pares hasta conseguirlo», debieron de repetirse día tras día estos genios con dificultades de aprendizaje que superaron sus limitaciones a pesar de que, de niños, parecían destinados al fracaso escolar. La perspectiva de motivar para aprender fue la clave.

En Kumon enseñamos a aprender por uno mismo. La cultura del esfuerzo ayuda a nuestros alumnos a desarrollar su capacidad de resiliencia y su potencial de aprendizaje y, como consecuencia, a dominar las materias escolares.

Debido a la gran demanda educativa del método Kumon en Portugal, hemos abierto nuestros primeros centros en Matosinhos y Braga. Con estos dos nuevos centros, iniciamos un plan de crecimiento en el país vecino que contempla la apertura de otros 20 centros en los próximos años. Las próximas aperturas se centrarán sobre todo en las áreas metropolitanas de Lisboa y Oporto.

Nuestros hijos trabajarán en profesiones que aún no se han inventado y evolucionarán de forma acelerada, por lo que las nuevas profesiones demandarán personas autodidactas, que aprendan por sí mismas, y no tengan miedo a los cambios.