Cómo ayudar a tu hijo a aprender a gestionar el estrés infantil

Aprender a gestionar el estrés infantil ayuda a superar la frustración y aporta un sinfín de beneficios. Te damos las claves para conseguirlo.

Los niños son absolutamente demandantes; por eso debemos enseñarles a gestionar el estrés infantil. De esta forma, los ayudaremos a superar la frustración.

Por qué surge el estrés infantil

El estrés infantil surge porque los niños:

• Quieren todo para ayer. No saben esperar y exigen todo de inmediato porque no tienen desarrollado el concepto del tiempo.
• No aceptan un no por respuesta e insisten con fervor hasta obtener el sí.

Nuestro objetivo como padres es formar a nuestros hijos para la vida, para el mundo al que les tocará enfrentarse, ese que está fuera de casa. Para conseguirlo, podemos seguir estos consejos.

Consejos para aprender a superar el estrés infantil:

1. No ceder a sus berrinches
Aprender que todo se consigue a base de rabietas no aporta ningún beneficio. Cuando tu hijo reaccione con agresividad, es mejor ignorarlo hasta que se le pase.

2. Reforzar las actitudes positivas
Crea un sistema de puntos para las actitudes positivas (círculo verde), negativas (círculo rojo) y en proceso (círculo amarillo). Coloca la tabla en la nevera o en algún lugar que resulte visible para toda la familia. El fin de semana, suma los puntos acumulados y premia sus actitudes positivas. ¡Verás los beneficios!

3. Los niños hacen lo que ven, no lo que les dicen
Decirle a tu hijo frases de motivación para superar el estrés infantil es inútil si no predicas con el ejemplo. Recuerda que eres el espejo en el que tu hijo se mira.

4. El éxito es sinónimo de esfuerzo
Nada es gratis en esta vida. Aprender a esforzarse para alcanzar objetivos es vital. Por ejemplo, para aprender a atarse los cordones o preparar la mochila escolar.

5. Dejar que se equivoque y aprenda de sus errores
La siguiente vez lo hará mejor.

6. Practicar el pensamiento positivo
Transforma situaciones que le resulten complicadas en oportunidades para obtener beneficios.

7. Los beneficios de la constancia
Si tu hijo se esfuerza una y otra vez en sortear sus dificultades, aprenderá a controlar el estrés infantil y alcanzará sus metas.

8. Los beneficios de la reflexión
Enséñale a identificar las situaciones que lo han llevado a sufrir estrés infantil, a descubrirlas por sí mismo. Si puede aprender a identificar el problema, hallará la solución.

9. Aprender a identificar prioridades
A través del juego enséñale a priorizar. Por ejemplo, hazle ver que debe terminar los deberes antes de ver la tele.

10. Reconocer sus esfuerzos
Un abrazo, un beso o una enhorabuena son gestos que refuerzan su autoestima y lo ayudan a superar el estrés infantil.

11. Aprender a tropezar y levantarse solo
No evites la caída a menos que veas peligro.

12. Hacer que asuma responsabilidades en casa
Desde pequeño y en función de sus capacidades, puede asumir responsabilidades en casa. Cada vez lo hará mejor.

Los errores están permitidos en Kumon: el alumno sabe aprender tanto de los aciertos como de los fallos que ha tenido al resolver un cuadernillo, siempre con la orientación de un orientador. No son motivo de frustración ni de estrés infantil.

Nuestro equipo de orientadores ofrece una atención individualizada y se adapta al ritmo de cada niño, lo ayuda en su evolución y favorece el desarrollo de todas sus capacidades de forma autónoma.

Si quieres conocer los beneficios que el método Kumon puede aportar a tu hijo, contacta con tu centro Kumon más cercano.