Belleza matemática: la identidad de Euler

¿Sabes cómo lograr que tus hijos se interesen por la asignatura de Matemáticas? Una de las fórmulas es contarles historias que despierten su curiosidad por aprender matemáticas, como la que les muestra la belleza matemática mediante la identidad de Euler.

Cuando en una conversación alguien menciona que las matemáticas le parecen feas o aburridas, o que los ejercicios de matemáticas son pesados e inútiles en la vida real, surgen inmediatamente muchos argumentos que intentan demostrar la belleza intrínseca de las matemáticas. Muchos son los secretos de las matemáticas que, al descubrirlos, nos hacen ver la belleza de esta ciencia, como ocurre con la constante de Kaprekar. Pero existe una fórmula que tradicionalmente está señalada como el mejor ejemplo de belleza matemática y que no se suele aprender en las aulas. ¿Cuál es?

Entrando en términos profundos, la teoría matemática define la belleza matemática a través de 4 aproximaciones distintas: belleza en el método, belleza en la geometría, belleza en la experiencia y belleza en los resultados. En este último tipo de belleza matemática se encuentra la identidad de Euler, fórmula que hoy queremos destacar y que el premio nobel de física Richard Feynman calificó como «la fórmula más notable de la matemática».

¿Pero qué es lo que hace tan destacable esta fórmula? Es bella por su extraordinaria sencillez y porque resulta ideal para aprender matemáticas, pues se podría decir que estas aparecen resumidas en la fórmula casi por completo.

El autor de la ecuación matemática más famosa es Leonhard Euler, de ahí que lleve su nombre: la identidad de Euler, llamada «identidad» porque en ella solo existen números. Aunque en la fórmula veamos letras, estas representan en realidad números. Pero no se trata de números cualesquiera, sino de los más famosos de las matemáticas: el número pi, el número e (precisamente así llamado también por Euler), el número i, la unidad y el cero. En esta identidad encontramos también los conceptos de suma, multiplicación, exponenciación e identidad y los cinco números fundamentales.

Aprender matemáticas de forma divertida es la fórmula para que tus hijos se enamoren de esta ciencia exacta. Adaptarlas a su ritmo de aprendizaje para que crezcan disfrutando de ellas es nuestra especialidad. A partir de los 2 años puedes ayudar a tus hijos a desarrollar su potencial de aprendizaje con Kumon Matemáticas. En este enlace puedes contactar con tu centro Kumon más cercano.