Matemáticas prácticas: cómo usar las matemáticas en el día a día con tus hijos
¿Alguna vez tus hijos se han preguntado por qué tienen que aprender álgebra, geometría o incluso aritmética básica? La respuesta es fácil: las matemáticas prácticas son una de las muchas competencias que las personas utilizan cada día en todo el mundo, ya sea para calcular los intereses que devenga su cuenta de ahorro durante un periodo de tiempo, para adaptar las raciones de una receta al número de comensales o para decir la hora.
Aquí van cuatro ejemplos de cómo tus hijos y tú podéis aplicar las matemáticas prácticas en vuestra vida diaria.
- Tus hijos tienen que llevar magdalenas para los veinticuatro alumnos de la clase
Si la receta nos da una docena de magdalenas, pero tus hijos tienen que hacer dos, tendrán que aplicar su competencia matemática en álgebra y adaptarla para que nadie se quede sin magdalena. En este caso, deberán duplicar la cantidad de cada ingrediente: por ejemplo, tres tazas y media de harina en lugar de una y tres cuartos, y dos cucharadas de levadura en lugar de solo una. La próxima vez que tus hijos tengan que hacer magdalenas o galletas, prueba a darles una receta en la que tengan que duplicar o dividir por la mitad las cantidades para hacer más o menos unidades.
- Tus hijos quieren saber cuánto queda hasta la hora de jugar
Si tus hijos quieren saber cuánto queda hasta la hora de jugar, tendrán que aplicar su competencia matemática. En este sentido, la habilidad de decir la hora es un método para introducir a tus hijos en las fracciones, al tiempo que practican su capacidad para sumar y restar. La próxima vez que tus hijos quieran saber cuánto queda hasta la hora de la cena o de jugar, ayúdalos a practicar su capacidad matemática diciéndoles qué hora es y la hora a la que está previsto que empiece esa actividad.
- Tu familia compra ropa o material nuevos para el colegio
La mayoría de las tiendas suelen anunciar ofertas con rebajas del 20% o del 30% respecto del precio que marcan determinados artículos. Para saber el precio real que tu familia pagará por ellos, pídeles a tus hijos que te ayuden a calcular la respuesta y así practicarán su capacidad matemática. La próxima vez que les compres ropa, invítales a calcular cuánto cuesta una prenda con un 20%, un 30% o incluso un 50% de descuento y ayúdalos a practicar.
- Tus hijos abren una cuenta de ahorro
Una de las principales funciones del cálculo es la de ayudar a medir los cambios que experimentan a lo largo del tiempo dos o más variables. Así pues, una aplicación práctica consiste en calcular cuánto ganarán tus hijos en seis meses si abren una cuenta de ahorro con 100€ a un tipo de interés del 2%. Utilizando la ecuación CF = CI (1 + i)t, donde, para hallar «CF», «CI» es igual a la cantidad que ingresan al abrir la cuenta, «i» es el tipo de interés y «t» equivale a 6 meses, calcularán unos intereses de 12,62€. La próxima vez que tus hijos quieran destinar la paga a un nuevo juguete o videojuego, prueba a explicarles que ahorrar puede ayudarlos en el futuro.
¿Se te ocurre alguna otra situación de la vida real en la que tus hijos y tú utilicéis las matemáticas prácticas? Nosotros tenemos muchas. Te las contamos en nuestros centros Kumon, mientras desarrollamos al máximo el potencial de aprendizaje de tus hijos.